CARTA ABIERTA

Tengo tantas cañas que construir y tantos lugares que visitar que esta vida no creo que me alcance.

Dale, te invito a pescar, vos pones el lugar y yo la caña.

   Hola, bienvenidos al blog de la caña viajera; para los que no conocen el proyecto les cuento: 

   Entre otras aficiones me dedico a la construcción artesanal de cañas de pescar y otros accesorios, con materiales tradicionales. 

   Además me gustan las modalidades de pesca antiguas y tradicionales. Cuando uno se pone a investigar, encuentra que en el mundo existen un montón que aún subsisten y a puñados de personas que siguen practicándolas. También hay otras que resurgen y se ponen de moda como es el caso de la modalidad Tenkara.

   La experiencia de pescar, por ejemplo, con una caña de bambú, una línea fija y una mosca minimalista, a algunos nos transporta a esos años en los que eramos unos niños y empezábamos a descubrir los secretos de la naturaleza, de la mano de nuestro padre o algún otro ser querido. 

   A otros les sucede que se sienten poseídos por los espíritus de los pioneros, aquellos que hace mucho tiempo atrás, descubrieron la forma de engañar a nuestros nobles adversarios.

   Finalmente están aquellos que descubren que "menos es más"; que no hacen falta costosos y sofisticados equipos para disfrutar de la pesca y que la verdadera pesca deportiva es aquella en la cual nuestro adversario cuenta con las mayores posibilidades de frustrar nuestros objetivos. Siempre pongo como ejemplo la película "El viejo y el mar", donde Spencer Tracy lucha mano a mano con un pez espada (si quieren pesca deportiva, ahí la tienen).

  Ahora tengo casi 50 años, ganas de construir muchas cañas y un montón de lugares vistos y por ver. También tengo ganas de que otros conozcan y sientan lo que yo. Tengo ganas de transmitir conocimientos y hacer amigos.

  Tal vez exista una manera de hacer un mundo mejor donde compartir, aprender y disfrutar de la vida, yo voy a aportar mi pequeño y humilde granito de arena.

  Mis cañas se van de viaje y yo con ellas (en espíritu), ustedes van a ser el vehículo y en el interín van a poder probarlas y disfrutarlas, pero a condición de mostrar sus lugares en el mundo y contar sus experiencias; lógicamente tendrán que desprenderse de ellas para que otros puedan vivir la misma experiencia; así de mano en mano formaremos una cadena interminable de amistad unidos por esa pasión común que es la pesca.

  Gracias, muchas gracias y de nuevo bienvenidos a LA CAÑA VIAJERA.

Anibal Ruben Reyes (Venymira)